Olancho está que arde y la criminalidad se disparó este fin de semana en el departamento más grande de Honduras. En menos de 24 horas se han reportado seis personas muertas y cinco heridos, la escena del crimen es la misma, los expendios de aguardiente.
Esta tarde mientras sonaba la música y se destapaban las botellas en la Copa Loca, se produjo una fuerte balacera en la que murieron dos personas y tres más resultaron gravemente herida.
Ayer por la noche en otro local, cuatro personas fueron atacadas por tres sicarios en moto. De ese atentado sobrevivieron tres personas que fueron hospitalizadas.
La Policía activó las alarmas y la operación candado en todo el departamento para dar con el paradero de los responsables de ambos crímenes que tienen en zozobra a los olanchanos.