El portavoz de la agencia de gestión de catástrofes naturales de Filipinas indicó que no han cesado las labores de rescate, por lo que la cifra de fallecidos podría aumentar en las próximas horas.
A 126 personas aumentó la cifra de fallecidos por el paso de la tormenta Usman que arrasó el centro de Filipinas a fines de 2018.
Las autoridades filipinas de rescate indicaron que la mayoría de las víctimas perecieron debido a los deslizamientos de tierra provocados por las fuertesprecipitaciones.
La tormenta, que azotó las islas del este y del centro del archipiélago el 29 de diciembre, también provocó importantes inundaciones.
Más de un centenar de personas fallecieron en la región montañosa de Bicol, al sureste de Manila, indicaron responsables de los servicios de gestión de catástrofes naturales.
«En solo dos días, la tormenta Usman dejó caer el equivalente a más de un mes de lluvias en la región de Bicol», declaró el portavoz de gestión de catástrofes naturales, Edgar Posadas.
Posadas indicó que la labores de búsqueda continúan a pesar de las dificultades por la inestabilidad de los suelos que suponen un desafío, agregó, y precisó que 26 víctimas permanecen desaparecidas.
Más de 152.000 personas fueron evacuadas a causa de la tormenta, y al menos 75 resultaron heridas.
El tifón Haiyan, ocurrido en noviembre de 2013, fue el más mortífero de la historia de Filipinas, dejando tras de sí a más de 7.350 muertos y desaparecidos.
