El ataque cobarde que sufrió esta tarde nuestra compañera María Martínez es solo un capítulo más del largo historial de violencia contra los comunicadores de Honduras. Es un episodio más de violencia contra la mujer que esperamos que no se vuelva a repetir.
El periodismo sigue siendo una de las profesiones más peligrosas del mundo pese a que los comunicadores solamente son el canal de la información. Esta tarde nuestra valiente reportera cubría un evento de la Alcaldía Municipal del Distrito Central cuando cuando fue atacada por una mujer que golpeó a María Martínez mientras otros partidarios de Libre rodeaban a Luis Anariba y al personal de HCH.
Afortunadamente las lesiones no son de gravedad, pero esto viene comprobar lo vulnerable que es la profesión del periodismo. Hoy el gremio se solidarizó con María Martínez.