La Administración de Control de Drogas (DEA) ofrece recompensas de hasta 20 millones de dólares por información sobre algunos miembros del Cártel de Sinaloa, entre los que destaca Rafael Caro Quintero, Ismael “Mayo” Zambada y los hijos de Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”.
Rafael Caro Quintero es buscado por secuestro y asesinato de un agente federal, crimen organizado, posesión con intención de distribuir mariguana y cocaína, además de la operación de una empresa criminal, y se ofrece una recompensa de 20 millones de dólares por él.
Ismael “El Mayo” Zambada de 74 años es señalado como el líder del Cártel de Sinaloa tras la detención de “El Chapo” Guzmán y se promueve una recompensa de 15 millones de dólares.
“Zambada García es único en el sentido de que ha pasado toda su vida adulta como un importante narcotraficante internacional, pero nunca ha pasado un día en la cárcel”, de acuerdo con información del Departamento de Estado.
Esta dependencia también ofrece una recompensa de hasta 5 millones de dólares por Iván Archivaldo Guzmán Salazar, hijo de “El Chapo” Guzmán.
Iván Archivaldo es catalogado como un miembro de alto rango del Cártel de Sinaloa y junto a su hermano Jesús Alfredo habrían ayudado al transporte de drogas desde Centroamérica a México.
También por el envío de estas sustancias a Estados Unidos, además de la recolección de las ganancias por la venta de las drogas para enviarlas a México en beneficio de la organización, según el Departamento de Estado.
Por Jesús Alfredo Guzmán Salazar, también hijo de “El Chapo” Guzmán, se ofrecen 5 millones de dólares; es buscado por conspiración para poseer con la intención de distribuir sustancias controladas.
