La ciudad de Nueva York, inmersa en su verano de reapertura turística, estrenó este miércoles una rueda de Chicago de más de 30 metros que se eleva sobre Times Square y ofrece vistas a la icónica plaza iluminada por enormes paneles publicitarios en el corazón de la Gran Manzana.
La atracción, también conocida en algunos países como rueda de la fortuna o noria y que estará abierta hasta el 12 de septiembre, busca convertirse en un emblema de la recuperación y aportar «aún más energía y emoción» a esta zona que estuvo inusualmente vacía durante la pandemia y hoy vuelve a reunir multitudes, según dijo el alcalde, Bill de Blasio, en una rueda de prensa.