Con mesa y silla en mano, la pequeña Angie Leiva camina kilómetros para poder encontrar conectividad y así recibir el pan del saber.
La pequeña niña, es originaria de Colinas, departamento de Santa Bárbara y con el fin de suplir la necesidad de educación, Angie junto a su mamá, quien la acompaña día a día en su trayecto «buscando» lugar donde haya señal para así poder aprovechar la hora de la clase, ya que donde viven no cuentan con conexión a internet.
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Debido a la viralización de una fotografía, donde Angie sale bajo un árbol recibiendo clases, una empresa que ofrece servicios de internet le donó una antena, la cual le servirá para que pueda recibir sus clases de una manera más cómoda en su hogar.
“Estoy muy feliz, a ella ya no le va a pegar el sol ni el agua, porque a veces me tocaba correr a taparla porque se venía la lluvia”, concluyó la madre de la pequeña.OR
