Esta receta no es la tradicional receta oriental, pero me ha ayudado mucho en esos momentos cuando mis hijos me piden comer algo distinto. Se prepara rápidamente y no requiere de estar clavado en la cocina cuidando su cocción.
Macere las costillas con el aceite, el adobo y la salsa inglesa por lo menos 1 hora antes de su cocción.En una cazuela o un wok, o sartén profundo ponga una pizca de aceite y cuando este caliente fría las costillas hasta que estén bien doradas.
Una vez lista las costillas, añada el caldo, o agua (no se mortifique mucho), hasta que cubra las costillas, agregue la cola, una vez que rompa el hervor añada la pasta de tomate, las cucharadas de azúcar y el vinagre blanco.
Luego de unos dos minutos agregue el cebollin.Cocine hasta que la salsa reduzca y espese hasta que obtenga es espesor deseado y agregue una cucharadita de mantequilla para darle brillo.
Si desea espesarla un poco más, puede preparar una cucharada de maizena en media tasita de agua fría y agregue a la salsa removiendo continuamente hasta lograr la textura deseada.
Sirva caliente con arroz blanco.
Esta receta también aplica para preparar chuletas ahumadas al estilo agridulce.
Cortesía: guiadelacocina.com