Nicolás Maduro propuso establecer conversaciones directas con la administración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en un nuevo intento por rebajar la tensión entre ambos gobiernos, según información publicada este sábado por Reuters.
El anuncio se produjo pocos días después de que fuerzas estadounidenses realizaran el primer ataque contra un barco venezolano, acción que Washington justificó señalando que la embarcación transportaba narcotraficantes. Este episodio ha sido uno de los momentos más críticos en la escalada de medidas militares y retórica entre los dos países.
En una carta dirigida a Trump y a la que accedió Reuters, Maduro rechazó las acusaciones que señalan a Venezuela como una vía central en el tráfico internacional de drogas.
El líder bolivariano sostuvo que “sólo el 5% de las drogas producidas en Colombia se envían a través de Venezuela”, de las cuales, afirmó, “el 70% fueron neutralizadas y destruidas por autoridades venezolanas”.
En el documento, Maduro expresó su deseo de superar el conflicto bilateral mediante una interlocución “directa y franca” con un enviado especial estadounidense, sugiriendo el nombre de Richard Grenell para reactivar el canal diplomático y contrarrestar lo que calificó como “falsedades” y “fake news”.
“Presidente, espero que juntos podamos derrotar las falsedades que han empañado nuestra relación, que debe ser histórica y pacífica”, manifestó.
Según la carta, Maduro reconoció el papel de Grenell en la resolución de incidentes previos y la facilitación de vuelos de deportación desde Estados Unidos a Venezuela, los cuales, según fuentes consultadas por Reuters, continuaron de manera regular “a pesar de los ataques estadounidenses”.
El venezolano fechó la carta el 6 de septiembre, cuatro días después del ataque al barco, en el que murieron 11 personas. Washington, por su parte, acusa a los fallecidos de integrar la banda criminal Tren de Aragua y de operar como narcotraficantes, aunque hasta el momento no se han presentado pruebas públicas que respalden esas aseveraciones. La Casa Blanca evitó pronunciarse sobre la misiva o las declaraciones de Maduro.
Maduro reitera conversaciones, pero con Grenell
Maduro aseguró que ese tema, al igual que otros, “siempre estarán abiertos” a una conversación “directa y franca” con el enviado especial de Trump, Richard Grenell, quien se reunió con Maduro a finales de enero en Caracas, Venezuela, en busca de un acuerdo con ese país para la repatriación de migrantes venezolanos deportados de EE. UU.
Esto, sostuvo, con el fin de “superar el ruido mediático y las noticias falsas”.
De esa manera, el líder chavista reconoció el papel de Grenell en la resolución de acusaciones anteriores sobre el Gobierno venezolano, que se negaba a recibir de regreso a sus compatriotas deportados.
Según la carta, Maduro reconoció el papel de Grenell en la resolución de incidentes previos y la facilitación de vuelos de deportación desde Estados Unidos a Venezuela. Incluso, destacó que “hasta la fecha, este canal ha funcionado perfectamente”.













