Emprender no es fácil pero todo depende del ánimo y lo que le gusta a una persona que desea hacerlo para salir adelante.
Basándose en esta teoría, en 2009, Celeste y Darío decidieron que querían comenzar desde cero en un nuevo país. Junto con sus dos hijas, se instalaron en el norte de San Paulo y abrieron un negocio de empanadas tucumanas que hasta la fecha ha conquistado el corazón de todos los brasileños.
¿Cuál es la clave de su éxito? Pues sencillamente se trata de un insólito pero tradicional ingrediente sorpresa: empanadas rellenas de dulce de leche.
“Cuando llegamos éramos cuatro, pero ahora somos cinco. Vivimos en una playa que se llama Meresías, es un barrio de San Sebastián”, explicó Celeste Alonso Dip, encargada del emprendimiento familiar que comenzó hace 13 años y hoy es furor en el país vecino.
Al iniciar su negocio, era sabido que las empanadas de Tucumán terminarían por atraer clientes ansiosos de conocer nuevas tradiciones. No obstante, como se trata de un local instalado en Brasil, a los argentinos les fue imposible evadir alguna preparación dulce para satisfacer a los oriundos.
La joven explicó que en este país suelen mezclar las comidas dulces con las saladas, como es el caso de las pizzas de chocolate o guayaba. Por eso, un cliente le pidió algo similar con su negocio. “Yo le decía que era un asco eso, pero me insistió mucho y me acuerdo que pensé en mi mamá que siempre comía banana con dulce de leche cuando yo era más chica y me imaginé que podría ser un buen sabor”, recordó.
En la actualidad cuentan con dos sabores vinculados en la tienda: relleno de dulce de leche y otro de dulce de leche con banana. “Ya no uso exclusivamente el dulce de leche argentino porque no llega el repostero acá, pero tengo uno que se fabrica en Brasil muy similar”, explicó la cocinera. Además aclaró que de todas formas los clientes “no creen que sea de Brasil, piensan que es argentino, porque identifican al dulce de leche como alguno exclusivamente argentino.”
El negocio cuenta con 19 variedades saladas y 6 dulces. ya que se han adaptado al paladar brasileño incorporando ingredientes como el requeijão. También venden vinos argentinos, choripanes y alfajorcitos tucumanos.













