“Yo estoy decidido a cruzar y no pienso separarme de mi mascota porque ella es mi ser querido”, contó el venezolano Miguel Abreu, quien actualmente está en Perú y debe cruzar a pie junto a Beckis, su mascota, el resto del continente.
Hay quienes sienten un amor tan profundo por sus mascotas que harían lo que fuera por no dejarlos solos en ningún momento, incluso si eso significa viajar con ellos en un bolso miles de kilómetros a pie, cruzando las fronteras de todo un continente para llegar a su destino, ese es el caso de Miguel Abreu.
Este joven migrante venezolano, quien ha recorrido gran parte de Sudamérica con grandes dificultades y que ahora espera llegar a Estados Unidos, con la intención de establecerse en ese país definitivamente, luego de haber vivido en otros al sur del continente.
En conversación con El Diario, relató que emigró de Venezuela para Chile en 2019, cruzando por tres países. Sin embargo, luego de pasar unos años en este país austral, decidió irse a Estados Unidos en búsqueda de una mejor vida. Pero no está solo, sino que va con su inseparable perrita, Beckis.
“Para mí, ella es un miembro más de mi familia. Le compré los zapatos cuando estaba muy chiquita para evitar que se quemaran sus patas cuando el piso estaba muy caliente. También tiene su gorra y un suéter para protegerla del frío”, contó Abreu.
A través de las redes sociales ha ido relatando lo que es su travesía, que no es nada sencilla hacerla a pie. De hecho, debe sortear quizás el obstáculo más grande de esta nueva ola migratoria del sur hacia Estados Unidos: atravesar la riesgosa selva del Darien, que conecta a Panamá con Colombia
Ya cuenta con más de 11.000 seguidores en TikTok, en su usuario dedicado a su perrita y mostrar el viaje que realizan. Muchos se han solidarizado con su causa, porque trabaja de la forma que puede a donde llega para que él y su compañera tengan un lugar donde dormir, además de algo para comer.
“Hace 4 meses inicié esta aventura con mi mascota. Empecé a viajar de una ciudad a otra para trabajar y ahorrar lo suficiente para lograr mi sueño, que es llegar a Estados Unidos Yo suelo limpiar los parabrisas de los carros en los semáforos o vendo chocolates. Es mi rutina diaria para pagar el hostal y las necesidades de mi perrita“, relató.
Actualmente se encuentra en Perú reuniendo más dinero para luego dar el gran salto al norte del continente. “Yo estoy decidido a cruzar y no pienso separarme de mi mascota porque ella es mi ser querido. Muchas personas me han estado escribiendo para asesorarme sobre los documentos que necesito para cruzar con ella”.

