Han vivido 85 años y se mueven en la arena política con más agilidad y velocidad que muchos jóvenes. Siguen siendo líderes en ejercicio, y cuando ya van dos décadas del siglo XXI, estos destacados uruguayos que nacieron a mitad de los años 30, se van juntos del Senado para dejar su banca a sus suplentes respectivos y empujar una renovación partidaria.
Adversarios políticos de toda la vida, como «compañeros de trabajo» se les ve conversando amablemente antes de una sesión del Senado, como ajustando códigos de una batalla de ideas que comenzó junto al inicio de la Guerra Fría y se extiende en pleno siglo XXI.
Uruguay se apresta a vivir un momento histórico de su vida política, con la renuncia simultánea de los senadores Julio María Sanguinetti y José «Pepe» Mujica.El voto boliviano de la Argentina, un factor clave para el MAS de Evo Morales
Sanguinetti es líder de «Batllistas» en el Partido Colorado, que hoy integra la coalición de gobierno de la que el ex presidente fue arquitecto clave junto al hoy mandatario Luis Lacalle Pou. Mujica es líder del «Movimiento de Participación Popular» en el Frente Amplio, la coalición de izquierda que este año volvió a la oposición luego de gobernar 15 años.
Formalmente ya están jubilados, pero ahora renunciarán definitivamente a la banca del Senado.
Entraron casi juntos a la política, pero en tiendas distintas, y la diferencia se agrandó en el camino. Fueron y son pasionales en la política, fueron y son un faro para multitudes, fueron diputados, senadores y presidentes de la República.