El gobierno de Estados Unidos anunció este lunes la imposición de un arancel del 25% a todos los productos importados desde Japón y Corea del Sur, medida que entrará en vigor el próximo 1 de agosto. Así lo comunicó la Casa Blanca en cartas enviadas al primer ministro japonés, Ishiba Shigeru, y al presidente surcoreano, Lee Jae-myung.
En las misivas, la Casa Blanca argumenta que la decisión responde a décadas de déficits comerciales “insostenibles” con ambos países, provocados por políticas arancelarias y barreras comerciales “no recíprocas”. Washington señaló que, aunque Estados Unidos mantiene su compromiso de trabajar con las dos naciones asiáticas, exige un comercio “más justo y equilibrado”.


Las cartas subrayan que los aranceles se levantarán para aquellas empresas japonesas y surcoreanas que decidan fabricar sus productos dentro del territorio estadounidense. También advierten que cualquier aumento en los aranceles por parte de Tokio o Seúl será respondido con un incremento proporcional sobre la tasa del 25%.


El déficit comercial con Japón y Corea del Sur, afirma la Casa Blanca, representa “una amenaza para la economía y la seguridad nacional” de Estados Unidos, por lo que la medida busca corregir los desequilibrios comerciales que han persistido durante años.













