Un brutal ataque en un vagón del metro de Chicago dejó a una mujer de 26 años gravemente quemada, mientras testigos y pasajeros no intervinieron para socorrerla. El agresor, Lawrence Reed, de 50 años, roció a la víctima con líquido inflamable y le prendió fuego, según el informe de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF).
Los hechos ocurrieron el pasado lunes por la noche, cuando la mujer intentó escapar del ataque corriendo hasta el final del vagón, totalmente envuelta en llamas, hasta desplomarse en el andén. Fue trasladada al hospital en estado crítico con quemaduras severas en la cabeza y el cuerpo. Reed huyó de la escena y fue arrestado al día siguiente. Durante su traslado a la comisaría, gritó: “¡Arde viva, perra!”.

El sospechoso, con un largo historial delictivo, mostró un comportamiento errático en su primera comparecencia judicial, incluyendo gritos y declaraciones confusas sobre su identidad y culpabilidad. Las autoridades federales lamentaron que Reed estuviera en libertad cuando cometió el ataque y confirmaron que se analizará su historial criminal y posibles problemas mentales en audiencias futuras.


