Este lunes se celebra en París la esperada gala del Balón de Oro 2025, el evento que reúne a la élite del fútbol mundial y donde se reconocerá al mejor jugador de la última temporada.
La ceremonia contará con la presencia de las máximas figuras del deporte, entrenadores y dirigentes, en un marco que cada año genera debate y expectativa en la afición.
El premio, organizado por la revista France Football, vuelve a ser el centro de la conversación deportiva tras un año cargado de grandes actuaciones. La atención está puesta en los principales favoritos, jugadores que han brillado tanto en sus clubes como en competencias internacionales, y que llegan con méritos suficientes para alzarse con el galardón más prestigioso a nivel individual.
Entre ellos, Ousmane Dembélé parte como el gran favorito. El extremo del Paris Saint-Germain firmó una temporada histórica, siendo pieza clave en el triplete del club francés. Su protagonismo en la Champions League, con goles decisivos y asistencias determinantes, lo colocan en la primera línea de candidatos.
Otro nombre de peso es el de Lamine Yamal, la joven estrella del Barcelona que a sus 18 años ha deslumbrado al mundo. Su influencia en el ataque blaugrana, su regularidad en la Liga y sus actuaciones en torneos europeos lo convierten en una alternativa real al premio, lo que sería un hito en su corta pero brillante carrera.
También figura Mohamed Salah, ídolo del Liverpool y referencia indiscutible del fútbol mundial. Su capacidad goleadora y constancia lo mantienen entre los nominados más sólidos, aunque la eliminación temprana de su club en la Champions podría restarle opciones frente a competidores con títulos más recientes.
Desde la misma liga española surge Raphinha, quien se ha ganado un lugar en la discusión gracias a su aporte ofensivo en el Barcelona. Su efectividad en partidos importantes y su rol como socio ideal en el ataque azulgrana lo colocan como uno de los nombres a seguir en la ceremonia.
Otro de los contendientes destacados es Vitinha, mediocampista del PSG que ha sorprendido a propios y extraños. Su control en el medio campo y su papel fundamental en la campaña triunfal del conjunto parisino lo han catapultado a la lista de aspirantes, representando el peso de los volantes en un premio históricamente dominado por delanteros.
La gala de hoy no solo coronará al nuevo Balón de Oro, sino que también definirá un capítulo más en la historia reciente del fútbol. Sea Dembélé, Yamal, Salah, Raphinha o Vitinha, el ganador tendrá el reconocimiento de haber marcado la diferencia en un año competitivo y de altísimo nivel. El mundo del deporte estará atento a quién se lleva la gloria en París.
