La cancelación del programa CBP One y otras medidas contra la migración irregular adoptadas por el presidente de EE.UU., Donald Trump, han tenido efectos en Tapachula, epicentro de la crisis migratoria en el sur de México, donde los traficantes de personas pelean por la ruta hasta la frontera norte, según denunciaron este miércoles activistas y migrantes.
Así lo indicó el director del Centro de Dignificación Humana (CDH) en esa ciudad fronteriza, Luis Rey García Villagrán, quien subrayó que los traficantes de personas están cobrando entre 10.000 y 15.000 dólares por viaje.
“Por eso, la lucha intestina también de los carteles, por eso, la guerra de la policía chiapaneca (Chiapas) con los diferentes carteles porque la mitad de eso que se gana de ese botín que tienen los traficantes de personas los carteles tienen que ver con esta guerra intestina porque se está peleando la ruta del tráfico y trata de personas”, informó.
De hecho, García Villagrán apuntó que, en ocasiones, los migrantes son acercados al cruzar el río Suchiate, que divide a México con Guatemala, y desde allí son llevados hasta la frontera con Estados Unidos, situación que refleja que la migración irregular no se ha detenido pese a las políticas de Washington.