La Selección de Honduras obtuvo una siguiente victoria en su camino hacia el Mundial de 2026 tras vencer 1-0 a Islas Caimán, en un partido más complejo de lo esperado.
Al término del encuentro, el director técnico Reinaldo Rueda ofreció una conferencia de prensa sincera, crítica y con visión de futuro, en la que dejó claro que el equipo debe evolucionar para alcanzar el objetivo.
El estratega catracho no ocultó su preocupación por ciertos aspectos mentales y actitudinales que han sido repetitivos en los primeros compromisos del año:
“Hoy recibimos otra lección como las de los dos primeros tiempos en Bermuda y hoy se ratificó en Islas Caimán. Nos sigue traicionando la mente. Por más que trabajamos, seguimos viendo de menos el nombre y la camiseta del rival”, expresó con franqueza.
Pese a las dificultades, Rueda reconoció el valor del triunfo y destacó las múltiples oportunidades creadas:
“Afortunadamente logramos la anotación, y bueno, el arquero de ellos fue figura. se tuvieron varias jugadas claras de gol, pero son partidos que nos dejan lecciones para poner los pies sobre la tierra y que debemos exigirnos cada partido”.
Uno de los temas más subrayados fue la falta de eficacia ofensiva:
“Es cuestión de formación, es difícil, es algo que hay que superar. Tenemos que evitar que el oponente tome confianza y reaccione. En esta ocasión no fuimos eficaces. Hicimos las variantes necesarias, y aún así nos costó mucho trabajo, pero en resumidas palabras, nos faltó el gol”, analizó.
Rueda explicó detalladamente el funcionamiento del equipo, el cual tuvo orden y posesión, pero careció de finalización:
“Se jugó bien ordenado, se circuló el balón, se hicieron las variantes ofensivas. Lo que faltó hoy fue el gol. Se jugó bien, se tuvo la posesión del balón, se intentó de media distancia, se intentó a través del juego aéreo, a balón detenido. Creo que el equipo jugó bien”.
El seleccionador también valoró el planteamiento táctico del rival, que complicó la propuesta hondureña:
“Ellos jugaban al error nuestro, a sorprendernos en una transición directa de la bola parada. Este partido es de esos que cuando el balón no quiere entrar, no entra, y cuesta trabajo como lo que nos pasó hoy”, admitió.