El FC Barcelona ya tiene cerrado a su nuevo guardameta. Joan García, hasta ahora arquero del RCD Espanyol, se convertirá oficialmente en jugador culé la próxima semana. Así lo han confirmado fuentes cercanas a la operación, que ya dan el fichaje como acordado en todos sus términos. El portero firmará un contrato por cinco temporadas, lo que demuestra la apuesta a largo plazo del club por el joven talento catalán.
El acuerdo entre el Barça y García se selló la semana pasada, tras recibir el visto bueno del futbolista y su entorno. Desde entonces, se han estado llevando a cabo los trámites administrativos correspondientes para formalizar su llegada al club blaugrana. Todo apunta a que el anuncio oficial podría llegar en cuestión de días, una vez completado el pago de la cláusula de rescisión.
El traspaso se materializará mediante el abono de los 25 millones de euros que figuran en la cláusula de salida del jugador con el Espanyol. Esta cifra será pagada íntegramente por el Barcelona, sin incluir intercambios de jugadores ni variables adicionales.
La operación, además de tener peso simbólico por el origen del guardameta, representa un golpe en el mercado dentro del ámbito catalán.
Joan García, de 23 años, ha sido una de las revelaciones en la portería del fútbol español en la última temporada. Con actuaciones destacadas bajo los palos y una progresión meteórica, ha llamado la atención de varios grandes clubes, pero ha sido el Barça quien se ha movido con mayor decisión para asegurar su incorporación.
Su perfil encaja con la filosofía de juego azulgrana: buen juego de pies, reflejos rápidos y madurez para su edad.
Este movimiento no solo refuerza la plantilla del primer equipo, sino que también encaja en el plan de rejuvenecimiento y proyección deportiva que el Barça viene impulsando en los últimos años.
Joan García llega para competir por un puesto en la portería del Camp Nou, en un contexto de transición generacional en la plantilla y con la mirada puesta en el futuro inmediato.