El Instituto Nacional Penitenciario (INP) inició este miércoles un proceso simultáneo de clasificación y traslado de personas privadas de libertad en distintos centros penales del país.
La medida busca reorganizar la población carcelaria tomando en cuenta criterios como el nivel de peligrosidad, situación jurídica, edad, género, condición médica y arraigo familiar, entre otros.
Los traslados están siendo supervisados por delegados de Derechos Humanos del INP y se realizan bajo parámetros establecidos en la normativa nacional e internacional.
Según las autoridades, el objetivo es reubicar a los privados de libertad en centros más adecuados según su perfil, priorizando la seguridad, la convivencia y el acceso a programas de rehabilitación.
