El Papa León XIV llama a transformar los desafíos juveniles en trampolines hacia la santidad
Ciudad del Vaticano. Durante un encuentro con los Hermanos de las Escuelas Cristianas en el Vaticano, el Papa León XIV lamentó los desafíos que enfrentan los jóvenes en la actualidad, como el relativismo, la superficialidad relacional y la inestabilidad emocional, pero exhortó a convertir estos obstáculos en “trampolines de lanzamiento” para alcanzar una vida plena según los designios de Dios.
En su alocución, el Pontífice describió a los jóvenes como “un volcán de vida” y destacó que, aunque poseen una riqueza enorme de energía e ideas, necesitan apoyo para canalizar ese potencial hacia su desarrollo integral. “También ellos necesitan ayuda para que esta riqueza crezca en armonía”, subrayó.
Ante los Hermanos de La Salle, el Papa recordó que la enseñanza es más que un oficio: es una misión y un ministerio.
Alentó a los educadores a renovar su compromiso con una educación centrada en el corazón del alumno y que “evangelice educando y eduque evangelizando”.
El discurso del Papa se dio en el marco de dos aniversarios importantes para la congregación lasallista: los 300 años de la aprobación oficial del instituto por parte del Papa Benedicto XIII y los 75 años desde que Pío XII proclamara a San Juan Bautista de La Salle como patrono de los educadores.
Finalmente, el Pontífice hizo un llamado a promover en las nuevas generaciones “fecundos itinerarios de santidad”, y a mantener viva la dimensión espiritual y eclesial de la educación como instrumento de transformación individual y social.