El Foro Social de Deuda Externa y Desarrollo de Honduras (FOSDEH) advirtió este martes sobre los riesgos de aprobar la nueva “Ley Especial de Fomento a las Inversiones por Medio de la Eficiencia de los Procesos de Licenciamiento Ambiental”.
Esta iniciativa, impulsada por el Congreso Nacional y el sector empresarial, busca modificar los actuales procesos ambientales para permitir licencias más rápidas, lo que ha generado preocupación por la falta de controles y transparencia.
Según el FOSDEH, la propuesta podría afectar los derechos de comunidades y pueblos indígenas al debilitar los procesos de consulta previa, libre e informada. Además, se señala que este tipo de reformas podrían aumentar los riesgos de corrupción, erosionar el Estado de derecho y poner en peligro la protección del medio ambiente.
Aquí la carta:
Un nuevo proyecto de ley que será discutido esta semana en el Congreso Nacional podría comprometer seriamente la sostenibilidad ambiental, la gobernanza democrática y el acceso de Honduras a financiamiento internacional. Se trata de la “Ley Especial de Fomento a las Inversiones por Medio de la Eficiencia de los Procesos de Licenciamiento Ambiental”, una iniciativa impulsada desde el Congreso en alianza con sectores empresariales.
Frente a esta amenaza, el Foro Social de la Deuda Externa y Desarrollo de Honduras (FOSDEH) ha emitido una contundente Carta Abierta, alertando sobre los múltiples riesgos que conllevaría aprobar este proyecto en su forma actual. La organización advierte que esta propuesta profundiza la falta de transparencia, debilita los mecanismos de participación ciudadana y socava el derecho de los pueblos indígenas al Consentimiento Previo, Libre e Informado.
Graves implicaciones nacionales e internacionales
Desde una perspectiva técnica y multidimensional, el FOSDEH señala que la ley no solo flexibiliza procesos claves de control ambiental —como la emisión, renovación o ampliación de licencias— sino que también crea mecanismos operativos que reducen el rigor del Sistema Nacional de Evaluación de Impacto Ambiental (SINEIA), abriendo la puerta a mayores niveles de impunidad y afectaciones socioambientales irreversibles.
A nivel internacional, el debilitamiento del marco ambiental hondureño podría cerrar las puertas a fondos climáticos, créditos blandos y financiamiento proveniente de bancos multilaterales de desarrollo como el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Corporación Financiera Internacional (IFC), entre otros. Estas instituciones exigen cumplimiento de salvaguardas sociales y ambientales estrictas, así como evaluaciones rigurosas de impacto.
“Honduras no puede darse el lujo de comprometer su reputación internacional y su acceso a inversiones sostenibles. Esta ley pone en riesgo la salud pública, los ecosistemas y la confianza del país en los mercados globales”, indica el FOSDEH en su carta.
Impactos al sector empresarial y al desarrollo sostenible
El FOSDEH también advierte que los propios sectores empresariales podrían verse afectados. La falta de garantías ambientales se traduce en mayores tasas de interés, menor acceso a créditos y rechazo de proyectos por parte de bancos adheridos a los Principios de Ecuador, que incluyen a más de 140 instituciones financieras a nivel global.
“Procesos ambientales débiles no son sinónimo de eficiencia, sino de alto riesgo. El desarrollo económico no debe construirse sobre la desprotección ambiental ni la exclusión ciudadana”, afirma la institución.
La aprobación de este proyecto también podría limitar el acceso de Honduras a recursos para la adaptación al cambio climático, aumentar la conflictividad social y profundizar la desigualdad territorial, afectando de forma desproporcionada a comunidades vulnerables.
Exhortación a tomadores de decisión
El FOSDEH hace un llamado firme al Presidente del Congreso Nacional, Luis Redondo, a los integrantes de las comisiones legislativas responsables y a los líderes empresariales a repensar el enfoque de esta ley. También exhorta a los presidentes de partidos políticos y a la Procuraduría General de la República a asumir su responsabilidad histórica frente a una legislación que podría hipotecar el futuro ambiental del país.
Finalmente, el FOSDEH propone fortalecer, no debilitar, el proceso de licenciamiento ambiental, mediante una inversión real en capacidades técnicas, transparencia institucional y participación ciudadana efectiva.