En la aldea Chotepe, ubicada en la zona norte del país, los bordos de contención juegan un papel crucial en la protección de las comunidades frente a las crecidas de los ríos, especialmente durante la temporada ciclónica, donde urgen que las autoridades «echen» mano a los que han denominado por años como «bordos de azúcar».
Estos bordos, reforzados con gaviones (estructuras de malla metálica rellenas de piedras), actúan como barreras que previenen inundaciones y la erosión del suelo, salvaguardando viviendas, cultivos y la infraestructura local.
Los residentes de Chotepe han manifestado su preocupación por el deterioro de estos bordos y la falta de mantenimiento adecuado, enfatizado que la inversión en la reparación y fortalecimiento de los gaviones es esencial para evitar desastres naturales que podrían tener consecuencias devastadoras para la comunidad.