Bajo la promesa de ayudarlo a continuar sus estudios, un adolescente de 12 años fue llevado a Choluteca, a vivir con un pastor evangélico que terminó siendo su presunto depredador sexual.
El hombre de 47 años fue capturado el miércoles por agentes de la Policía Nacional en la zona sur de Honduras.
De acuerdo con las investigaciones, el pastor habría engañado a la madre del menor asegurándole que lo apoyaría académicamente para cambiar su calidad de vida; sin embargo, la promesa de desvaneció y el menor vivió momentos de calvario en manos de su agresor.
El individuo que ocultaba sus más bajas pasiones simulando ser un gran líder religioso, se ganó la confianza de la familia, tanto que la madre del afectado no dudó en entregarle a su hijo, sin imaginar el horror que le tocaría experimentar.
Vecinos fueron testigos del horror
El menor era sometido a abusos del religioso que ante la comunidad se mostraba como un hombre de fe; no obstante, vecinos que se percataron de los continuos llantos del menor desde la vivienda donde permanecía encerrado, alertaron a las autoridades de las macabras prácticas.
Fue así como la Unidad Trasnacional de Investigación Criminal (UTIC) inició una investigación, descubriendo que el joven estaba siendo víctima de abuso sexual.
Tras las pesquisas, se ejecutó la orden judicial emitida el pasado 30 de abril de 2025 por el Juzgado de Letras de San Lorenzo, Valle, en contra del presunto agresor, acusado del delito de violación calificada agravada en perjuicio de un testigo protegido.
El detenido, originario y residente de Choluteca, fue puesto a disposición de las autoridades competentes.
Hasta el momento, el caso sigue bajo investigación, y no se han brindado detalles adicionales sobre el estado de la víctima ni su actual paradero. No obstante, la captura del supuesto agresor ha causado indignación en la comunidad, que confiaba en el líder religioso.
Olvidaron la fe por pasiones pecaminosas
El hecho no es aislado de otros casos que en los últimos días han acaparado titulares de los portales digitales en Honduras y el mundo. Para el caso, recientemente en San Pedro Sula, el pastor, Erick Geovany Zambrano recibió una tercer condena por el delito de violación continuada y agresiones sexuales calificada.
El ahora condenado aprovechando su condición de pastor y con la visita de menores de edad a la escuela dominical a la iglesia evangélica que rectoraba, aprovechada las circunstancias que se le presentaban para engañar a sus víctimas y así saciar sus instintos sexuales.
Otro caso que estremeció al mundo es el de José Erley Ramírez Garcés, pastor de la iglesia Ministerio Apostólico del Reino en Santa Rosa de Cabal, Risaralda, Colombia, quien fue captado en un video corriendo detrás de su hijastra de 13 años, a quien habría violado y planeaba quitarle la vida.
El video que le dio la vuelta al mundo ha sido condenado por internautas que lamentan la vulnerabilidad a la que están expuestos los menores debido a religiosos que ya no le temen a Dios.