Manifestantes de Argentina se enfrentan este miércoles con un imponente operativo policial en una nueva protesta de los jubilados en el Congreso, en Buenos Aires, que contó con la participación de una veintena de hinchadas de fútbol, sindicatos y agrupaciones políticas.
Todas las fuerzas federales con escudos, camiones hidrantes y motocicletas han sido dispuestas para el operativo que ordenó el Ministerio de Seguridad que dirige Patricia Bullrich, a fin de impedir el bloqueo de calles en las inmediaciones del Palacio Legislativo.
Allí, los efectivos de seguridad lanzan gases lacrimógenos y balas de goma contra los manifestantes, algunos de los cuales responden arrojando piedras contra los cordones policiales.
Grupos de policías en motocicleta salen a la ‘caza’ de los militantes que aún persisten en la intención de acercarse al edificio del Parlamento, que se encuentra completamente vallado.
El escenario se ha tornado casi apocalíptico. Un patrullero de la Policía de la Ciudad y varios contenedores de basura fueron incendiados, se oyen detonaciones, sirenas y alarmas, mientras el humo que dejan el fuego y los gases lacrimógenos tornan el aire irrespirable, de acuerdo a los reportes de la prensa.
Mientras la policía reprime y la tensión crece, dentro del Congreso los diputados están sesionando por el escándalo conocido como ‘criptogate’, que involucra al presidente Javier Milei en un caso de estafa, y por la declaración de emergencia para la ciudad de Bahía Blanca, azotada por las inundaciones, con 16 víctimas fatales y pérdidas millonarias.
En las redes sociales, se viralizó un video del momento en que una anciana es golpeada con una porra en la cabeza por un efectivo policial, luego de lo cual cae desplomada sobre la calle, donde la asisten otros manifestantes.
Incluso un reportero de RT, Ricardo Romero, casi recibe el impacto de una bala de goma mientras cubría la manifestación en la calle. Un agente motorizado dobló en la esquina donde se encontraba Romero y disparó su arma a la altura de la cabeza, a pocos metros de donde se encontraba el trabajador de prensa, que resultó sorprendido en medio de sus tareas.
Una muestra de solidaridad que terminó en violencia
La marcha de esta semana contó con la particularidad de que las hinchadas de fútbol de Argentina se autonconvocaron a participar en defensa de los jubilados.
Más de 20 parcialidades de diversos clubes del país llamaron desde las redes sociales a acompañar a los pensionados al Congreso, luego de reiterados hechos de violencia y represión policial.
La iniciativa surgió a raíz de que uno de los jubilados, Carlos Dawlowski, de 75 años de edad, fue reprimido en una de las protestas mientras llevaba puesta una camiseta del club Chacarita Juniors, y es un reconocido simpatizante del club de la localidad de San Martín, en la provincia de Buenos Aires. Fue así que la semana pasada se unieron a él un grupo de hinchas que se identificaban con las insignias del ‘Tricolor’, y se enfrentaron con la policía.
La protesta tiene que ver con la pérdida del poder adquisitivo de los jubilados, que se ha deteriorado gravemente desde que se implementaron las políticas de ajuste por parte del Gobierno de Milei.
De acuerdo a la Defensoría de la Tercera Edad, un jubilado necesita al menos 1.200.523 pesos mensuales ( unos 1.126,40 dólares) para afrontar sus gastos básicos. Sin embargo, el haber mínimo en marzo fue de 350.000 pesos, que con un bono incluido de 70.000 pesos (por única vez) suman un total de 420.000 pesos (394 dólares), reportó la agencia Noticias Argentinas.

