Como uno de los principales retos para los gobiernos venideros es el de reducir la dependencia en el tema de remesas, un importante ingreso económico que fortalece las finanzas del Estado de Honduras y el cual se ha visto golpeado debido a las deportaciones masivas y zozobra por la comunidad migrante en los Estados Unidos.
Expertos han manifestado que “esto sabemos que siempre ha crecido, lo que no sabemos es que puede pasar y que medidas puede tomar la nueva administración, debemos estar atentos como sociedad y creo que las autoridades están llamadas a liderar este proceso, políticas que permitan mayor sostenibilidad interno y no depender tanto de factores inestables”.
Es importante subrayar que, las remesas significan un 26% del Producto Interno Bruto (PIB), lo que se traduce en unos 9,742 millones de dólares al año.