Con la investidura para un segundo mandato del presidente Donald Trump en los Estados Unidos, expertos manifiestan que una “avalancha” podría repercutir fuertemente en la economía nacional, esto debido a que la mayoría de las divisas provienen de la nación norteamericana.
El vicecanciller, Antonio García, expresó que “vemos a Estados Unidos como un socio, tenemos problemas en común, resolverlos sentados hablando es lo mejor, especialmente el tema migratorio que es sensible para Honduras y usaremos nuestra diplomacia al máximo y esperamos que ellos entiendan que somos un país pequeño que lo que pasa aquí impacta allá y que acomodaremos sus problemas y necesidades con las nuestras mediante al dialogo”.
La problemática proviene ante la determinada maniobra implementada por el mandatario, quien ha arreciado la política migratoria y de deportación, causando un grave impase debido a que, con el gran número de hondureños que serían retornados, afectarían grandemente las remesas, las cuales representan el 25% del Producto Interno Bruto (PIB).