La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó la madrugada de este miércoles (15.01.2025) de ocho muertos vinculados a un posible brote del virus de Marburgo -similar al ébola- en el oeste de Tanzania (África), y alertó que el riesgo de propagación en el país y la región era «alto», aunque precisó que el peligro de una expansión global de la enfermedad era «bajo”.
A través de un comunicado, la OMS -que está esperando la confirmación de las pruebas de laboratorio- señaló de que el pasado día 10 la organización recibió «informaciones fiables de fuentes locales» sobre la posible presencia de esta enfermedad. A fecha del 11 de enero se habían documentado nueve casos sospechosos, de los cuales ocho habían muerto, en dos distritos de Kagera: Biharamulo y Muleba.
«Los casos presentaban síntomas similares de dolor de cabeza, fiebre alta, dolor de espalda, diarrea, hematemesis (vómitos con sangre), malestar (debilidad corporal) y, en una fase más avanzada de la enfermedad, hemorragia externa (sangrado por los orificios)», detalló la OMS, que explica que la localización del presunto brote, cerca de la frontera con Ruanda, Uganda y Burundi, presenta un «riesgo alto» a nivel regional.
Alta tasa de mortalidad
Las autoridades tanzanas tomaron muestras de dos pacientes y están a la espera de los resultados. De momento ya se han identificado contactos, incluyendo trabajadores sanitarios, y se han intensificado las actividades de vigilancia. Esta región ya fue escenario de otro brote de Marburgo en 2023, el primero experimentado por Tanzania, que dejó al menos nueve casos y seis muertos.
Al igual que el ébola, el virus de Marburgo provoca hemorragias repentinas y puede producir la muerte en pocos días, con un período de incubación de 2 a 21 días y una tasa de mortalidad de hasta el 88 por ciento. Los murciélagos de la fruta son los huéspedes naturales de este virus, que cuando se transmite a los humanos puede ser contagiado mediante contacto directo con fluidos como la sangre, saliva, vómitos u orina.
La enfermedad, para la que no hay vacuna ni tratamiento específico, fue detectada en 1967 en la ciudad alemana de Marburgo -origen de su nombre- por técnicos de laboratorio que resultaron infectados cuando investigaban a monos traídos de Uganda.