El último informe del Mecanismo de Reconocimiento de Personas Presas Políticas en Nicaragua reporta que al menos 25 simpatizantes sandinistas se encuentran en prisión por expresar críticas en privado contra el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
“El Mecanismo reconoce la existencia de al menos 25 personas trabajadores del estado y simpatizantes del partido de gobierno que sufren de detención arbitraria y que sus familias no denuncian porque están amenazadas. Claro reflejo que la dictadura está aumentando la persecución dentro de sus mismas filas”, expresa una nota de prensa publicada esta semana por el organismo que monitorea la situación de los presos políticos en Nicaragua.
Los detenidos son parte de las purgas que ha emprendido Rosario Murillo, vicepresidenta y esposa de Daniel Ortega, contra quienes considera puedan ser obstáculos en su proceso de control del régimen que gobierna a Nicaragua, asegura un miembro del llamado Grupo de Reflexión de Excarcelados Políticos (GREX).
“Podemos afirmar que la causa es porque han expresado, en la mayoría de los casos en privado, alguna molestia o crítica al régimen y, en el proceso de consolidación e imposición de la autoridad de Rosario Murillo, han sido percibidos como posibles o futuros disidentes”, dice la fuente que solicita anonimato por seguridad.