No fue jugando bonito, pero sí efectivo y sabiendo aguantar los temporales. Con sufrimiento en los últimos minutos, pero América es tricampeón del futbol mexicano y esta vez hizo su víctima al Monterrey, así como Tigres y Cruz Azul lo sufrieron en los últimos dos torneos, con las Águilas en lo más alto, ahora con un global de 3-2, con empate a uno en la Vuelta.
En un semestre donde tuvo muchas cosas en contra, desde el cierre del Estadio Azteca, la mudanza a la Ciudad de los Deportes y las pobres asistencias, encontrar en Puebla una sede para la Final de Ida y una ola de lesiones, el América, pese a todo eso, demostró que es la Bestia de las Liguillas y, en este formato, nadie es más demoledor y sus 16 estrellas lo comprueban.
Richard Sánchez, uno de los futbolistas de los que más se ha especulado su posible salida para este invierno, confirmó que “si no es golazo, no vale”. Tal y como dejó una obra maestra ante Cruz Azul en las Semifinales, el paraguayo volvió a regalar una pincelada para la memoria, ahora con un zapatazo desde afuera del área que se metió a segundo poste, casi en el ángulo, para el 1-0 del América en el minuto 24.
El Gigante de Acero enmudeció. Beso en la mejilla de Álvaro Fidalgo para el guaraní, quien, de estar prácticamente borrado en la fase regular, se convirtió en uno de los protagonistas americanistas en esta Liguilla. Y el silencio fue sepulcral después del gol porque Rayados no mostró capacidad de reacción y par de veces se salvó del que pudo ser el segundo con dos acciones de Alejandro Zendejas que no llegaron a la red.
La mala noticia del primer tiempo para los de Coapa fue la lesión de Henry Martín, quien antes del minuto 10 ya mostraba dolencias en la pierna derecha, pero soportó media hora más y fue hasta el 40’ que quedó tendido en la cancha, entregó el gafete de capitán y se retiró abrazado por cada uno de sus compañeros para dar paso a Rodrigo Aguirre, abucheado a más no poder por su pasado poco exitoso con la Pandilla.
Las entradas del Tecatito Corona y Roberto de la Rosa le dieron al Monterrey su jugada más clara hasta el minuto 73, cuando el primero hizo una individual que dejó al delantero en el área, pero su derechazo salió desviado. En la siguiente, el americanista Rodrigo Aguirre se plantó ante Luis Cárdenas para el que hubiese sido el que liquidaba, pero el uruguayo se la estrelló en el cuerpo al portero de los regios.
Los últimos 15 minutos fueron de total posesión de la Pandilla. En casi todas se fueron a estrellar contra el muro amarillo que se plantó en un tercio de cancha. Las Águilas apostaron a no tener el balón y terminaron agobiados porque Johan Rojas metió el 1-1 al minuto 85 con un derechazo en el área que Malagón ni siquiera alcanzó a ver.