Las ayudas que los madrileños han aportado para los afectados por las torrenciales lluvias que asolaron la provincia de Valencia, en octubre pasado, todavía están almacenadas en los espacios habilitados por la Delegación del Gobierno de España en la Comunidad de Madrid.
De los 13.000 palés de diverso material, recibidos desde que se produjo el desastre, 8.500 permanecen todavía en las instalaciones, mientras que 3.000 se enviaron a los diferentes municipios valencianos afectados y otros 1.500, compuestos por alimentos perecederos, fueron destinados a entidades sociales de Madrid, como el Banco de Alimentos, Cáritas, Cruz Roja o Hambre Cero.
A través de un comunicado, la Delegación del Gobierno informó el jueves que solo se ha enviado el material demandado por los servicios de emergencia en Valencia, para no «desperdiciar donaciones ni bloquear las redes de suministros y puntos de recogida con material que no fuese a ser utilizado».