El Tribunal Supremo de Estados Unidos se inclinó este miércoles a respaldar la ley del estado de Tennessee que prohíbe el acceso de los menores trans a bloqueadores de pubertad y terapias hormonales a pesar de que los jueces han dudado de su capacidad para decidir sobre la materia.
Durante las más de dos horas que ha durado la audiencia, impulsada por una denuncia de menores trans, sus padres y un médico contra la ley de Tennessee conocida como SB1, los jueces, en su mayoría conservadores, se han mostrado escépticos a enfrentarse a la norma estatal.
Presidente del Supremo: los menores trans están desprovistos de experiencia
El presidente del Supremo, el magistrado John Roberts, justificó su escepticismo al alegar que están “extraordinariamente desprovistos de experiencia”.
Roberts no ha sido el único juez conservador que ha dudado de la capacidad del Tribunal para determinar esta cuestión.
El magistrado Brett Kavanaugh tampoco estaba muy convencido de que esta decisión tenga que ser adoptada por los tribunales y, a su juicio, sería mejor que lo hiciese los parlamentos elegidos democráticamente.