El expresidente de Uruguay José Mujica votó este domingo y en declaraciones posteriores a la prensa aseguró que –pese a ser pequeño– su país se ha ganado el reconocimiento de ser estable y tener una ciudadanía que respeta las formalidades institucionales, algo que no es poca cosa «en una pobre y golpeada América Latina».
Unos 2,7 millones de ciudadanos están llamados a votar en el balotaje entre el oficialista Álvaro Delgado o el opositor Yamandú Orsi.
«Eso lo tenemos que cuidar entre todos», aseveró Mujica, quien recordó que costó mucho aprender y generar eso, ya que lo más fácil es patear y deshacer todo.
Por otra parte, el exmandatario aseveró que el clima que se vive en la campaña electoral lleva a que inevitablemente se «exacerban los ánimos».
No obstante, remarcó que el próximo Gobierno va a tener que tener la capacidad de crear un clima que permita acercamientos para negociar e intercambiar.
Asimismo, afirmó que personalmente ya «no tiene nada más que esperar» porque –por razones de edad– lo más próximo en su futuro es «el cementerio».
Pese a esto, enfatizó que le interesa «la suerte de los jóvenes» ya que cuando tengan su edad vivirán un mundo muy distinto e hizo hincapié en que el país se debe desarrollar en este momento para tener los recursos que se deben «meter en la cabecita» de los más pequeños.
«Tener plata para meter en la cabeza de los chiquilines (jóvenes) para que estén a la altura de la sociedad del conocimiento. Porque si no, como dice Harari, vamos a pertenecer al mundo de los irrelevantes. El mundo está cambiando», apuntó.