El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, anunció este lunes ante el G20 que España va a comprometer 400 millones de euros destinados a la entidad del Banco Mundial que presta ayuda a los países más pobres.
Sánchez hizo este anuncio ante el resto de líderes del G20 en su intervención en la primera sesión de la cumbre de este grupo de países que se celebra en Río de Janeiro, dedicada a abordar el problema del hambre y la pobreza en el mundo.
Las intervenciones de los líderes, a excepción del anfitrión, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, fueron a puerta cerrada, pero fuentes del Gobierno español informaron del anuncio de Sánchez.
En concreto, avanzó que España “está dispuesta a predicar con el ejemplo” en la lucha contra el hambre y la pobreza y comprometerá 400 millones de euros en la próxima reposición de la Asociación Internacional de Fomento, que es la entidad del Banco Mundial que ayuda a los países más pobres.
Esa contribución explicó que supone un incremento de casi el 40 % respecto a la anterior reposición.
España se compromete en el G20 con la Alianza contra el Hambre y la Pobreza
Ante el plenario de la cumbre, en el que estuvo presente la esposa de Sánchez, Begoña Gómez, como las parejas de otros líderes tras la invitación expresa realizada por Lula, Sánchez reiteró el apoyo de España a la Alianza contra el Hambre y la Pobreza que vio la luz oficialmente al inicio de la reunión y que se trata de una iniciativa impulsada por el presidente brasileño.
Una alianza a la que España fue uno de los primeros países en adherirse y que pretende la erradicación del hambre y la pobreza para 2030 mediante el impulso político al más alto nivel mediante la movilización de la financiación y promocionando la cooperación horizontal entre países.
Para Sánchez, hay cifras “inaceptables” y totalmente evitables, como que alrededor de 733 millones de personas pasaban hambre en 2023, mientras que aproximadamente 712 millones de personas vivían en la pobreza extrema en 2022, 23 millones más que en 2019.
Por eso consideró que no hay causa más importante ni urgente por la que luchar que erradicar el hambre, disminuir drásticamente la pobreza y reducir desigualdades.
El presidente del Gobierno aseguró que España ya está cumpliendo con sus objetivos que se ha puesto en el país, como subir el salario mínimo más de un 50% desde 2018, crear un Ingreso Mínimo Vital que ya está protegiendo a dos millones de ciudadanos y reducir la desigualdad a lo que ha calificado de mínimos históricos.
Sánchez ensalzó el liderazgo personal de Lula para la creación de la Alianza.
Un llamado por compromisos concretos
Sánchez, además, destacó que la inseguridad alimentaria, la malnutrición y la pobreza se ven agravadas por el cambio climático, y por eso llamó a luchar contra ello.
El presidente de Gobierno defendió también que para erradicar el hambre y la pobreza y alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible de la ONU hay que revisar la financiación para el desarrollo.
Por eso instó a adoptar decisiones audaces en la IV Conferencia Internacional sobre Financiación para el Desarrollo que se celebrará en España el próximo año.
Son necesarios, según Sánchez, compromisos concretos para reformar la arquitectura financiera internacional y hacerla más inclusiva, democrática, responsable y sensible a las necesidades de los países en desarrollo.
En ese contexto expresó su apoyo a la propuesta de Lula de crear un impuesto global para las grandes fortunas.
Ese impuesto lo enmarcó en una de las acciones que pueden mejorar el acceso al capital en los países en desarrollo que lo necesiten, así como políticas de lucha contra la evasión y elusión fiscales, y de mejora de la justicia fiscal.