La sanción suena durísima. Pero también es cierto que para la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (Aprevide), que tiene jurisdicción sobre Provincia de Buenos Aires, la situación fue grave. 22 heridos y una connivencia que dicen tener probada para el ingreso de la pirotecnia en conjunción entre directivos, personal de seguridad privada, socios y barras, todo burlando el operativo policial. Es por eso que la medida salió en principio más grave de lo que se suponía: clausura total del Cilindro de Avellaneda por un mes.
Esto es hasta el 4 de diciembre. Durante ese lapso, el equipo de Gustavo Costas deberá jugar a puertas cerradas. Se insiste, hasta la publicación de la resolución del Ministerio de Seguridad bonaerense se suponía que la sanción sería sólo para un partido. Al final fueron 30 días pero, al fin y al cabo, seguirá siendo sólo un partido. De acá hasta esa fecha la Academia juega de local sólo frente a Independiente Rivadavia de Mendoza el domingo 10 de este mes. Porque el siguiente encuentro, pautado en principio para el domingo 24 ante Estudiantes de La Plata, será reprogramado porque la final de la Copa Sudamericana es justo un día antes. Y se supone que, con buen tino, la AFA accederá al pedido de Racing para jugarlo una vez que pase la sanción.
Claro que hay un tema quizá pegue en forma tremenda en el corazón del hincha de Racing: la posibilidad de que se habilite la cancha para ese sábado 23 para ver en pantalla gigante el partido contra Cruzeiro también quedó fuera de juego. Si bien no se trata de un partido de fútbol, en la Aprevide le explicaron a Infobae que no deja de ser un evento deportivo, por lo que el club no podrá organizar esa movida parecida al “llenamos dos canchas el mismo día”, cuando Racing quebró la racha de 35 años sin títulos el 27/12/01 y salió campeón de la mano de Mostaza Merlo. Y un tema más: tampoco se abrirá el Presidente Perón para festejos posteriores en caso de que el equipo consiga la ansiada Copa Sudamericana. Si bien para ese momento faltan aún 20 días y la dirigencia racinguista intentará moverse políticamente para cambiar esta decisión, por ahora la Provincia está firme en su resolución. Se verá si afloja con el paso del tiempo.