El FC Barcelona comunicó que acatará la sanción de la UEFA por el comportamiento racista de algunos aficionados azulgranas en el Estadio Luis II de Mónaco, y se comprometió a reforzar las medidas actuales para castigar a los responsables y evitar que estos hechos se repitan.
La UEFA ha sancionado al club catalán con 10.000 euros de multa y la prohibición de vender entradas para el próximo desplazamiento en la Liga de Campeones tras los hechos sucedidos el pasado 19 de septiembre en el partido de la primera jornada de la máxima competición continental entre el Barça y el Mónaco.
El Barcelona, que «acatará y aplicará» esta sanción en el partido de la cuarta jornada de la Liga de Campeones en el campo de Estrella Roja de Belgrado, el 6 de noviembre, y confirmó que devolverá el importe de la entrada a todos los aficionados que ya la hubieran comprado.
Por otra parte, el club subrayó que «rechaza cualquier tipo de apología de la violencia y, como marcan los artículos 3 y 4 de sus estatutos, velará por la protección y promoción de la Declaración Universal de los Derechos Humanos».
Asimismo, el Barcelona admitió la existencia de «comportamientos» de los grupos de animación y de los aficionados que están acarreando «reiteradas sanciones, tanto en el ámbito estatal como internacional».
Ante esta situación, el club comunicó que «reforzará las medidas actuales y emprenderá las actuaciones adicionales que sean adecuadas para evitar que estos hechos se repitan en el futuro, así como para sancionar a los responsables».