La tormenta tropical Francine mantiene este martes sus vientos máximos sostenidos de 100 kilómetros por hora (65 millas por hora) y se espera que hoy se convierta en un huracán mientras prosigue su trayecto rumbo a la costa sur de EEUU, donde se prevé toque tierra mañana miércoles.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés) de EE.UU., pronostica que en el transcurso de hoy Francine se intensificará hasta convertirse en un huracán y que tenga “un fortalecimiento significativo antes de que llegue a la costa” estadounidense, en especial la del sureño estado de Luisiana.
El centro de Francine se mantiene la mañana de hoy frente a las costa de México, a unos 200 kilómetros (125 millas) al sureste de la boca de Río Grande y a 540 kilómetros (395 millas) al sur-suroeste de Cameron, en Luisiana.
Francine se convertirá en huracán
Francine, que se formó este lunes en el Golfo de México y es la sexta tormenta en la actual temporada de huracanes en el Atlántico, ha motivado un aviso de huracán para la costa de Luisiana desde Sabine Pass hasta Grand Isle, y desde High Island hasta Sabine Pass.
Hay alertas de marejada ciclónica para Vermilion Bay y para High Island (Texas) hasta la desembocadura del río Misisipi (Luisiana).
La tormenta, que se formó tras unas semanas de calma en la cuenca atlántica, se mueve hacia el norte a 7 kilómetros por hora (5 millas por hora) y se pronostica que hoy desacelere para luego incrementar su velocidad de desplazamiento a la vez que gire hacia el noreste.
Lluvias de 30 centímetros
Se espera que Francine produzca lluvias de hasta 30 centímetros en áreas del noreste de México y el sur de Texas, y que eleve el mar hasta unos 3 metros por encima del nivel habitual en Cameron y la Bahía de Vermilion, en Luisiana.
El anterior sistema ciclónico que se formó en el Atlántico fue Ernesto, que apareció en agosto como una tormenta tropical y llegó a ser un huracán de categoría 2 en la escala Saffir-Simpson, de un total de 5.
Ernesto, que causó graves inundaciones y apagones en Puerto Rico, lo mismo que estragos en las Islas Bermudas, es hasta el momento el tercer huracán en lo que va de temporada en la cuenca atlántica, que comenzó el pasado 1 de junio, y desde entonces ha producido también las tormentas tropicales Alberto, Beryl, Chris, Debby.
De ellas Beryl, Debby y Ernesto se fortalecieron hasta llegar a huracanes. Beryl incluso alcanzó la mayor categoría en la escala Saffir-Simpson, la cinco, causando destrucción y muerte en el Caribe y en Estados Unidos.
Se prevé que esta temporada de huracanes en el Atlántico sea una de las más activas e intensas en décadas, con la formación de hasta 25 tormentas y 13 huracanes.