El gobierno de Luis Lacalle Pou decidió adherirse a una denuncia que en 2018 presentaron seis países —Argentina, Canadá, Colombia, Chile, Paraguay y Perú— contra el régimen venezolano de Nicolás Maduro ante la Corte Penal Internacional.
La determinación de sumarse a esta iniciativa, que por estas horas el canciller Omar Paganini está instrumentando, fue tomada luego de una recomendación que el senador Javier García planteó en la Comisión de Asuntos Internacionales de la cámara alta el pasado 14 de agosto.
García había propuesto un documento base, dirigido al fiscal Karim Khan, que consignaba las «nuevas circunstancias sobre la situación en Venezuela», que atraviesa una profundización de su crisis política e institucional desde las elecciones del 28 de julio, basado en los informes del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU a lo largo de los últimos años.
Así, el texto de García consignó los reportes de asesinatos, desapariciones forzadas y detenciones políticos ocurridas desde 2020 a la fecha.
«Hay práctica serial de ejecuciones, desapariciones forzadas y torturas sistemáticas», dijo este senador del Partido Nacional en su cuenta de X, luego de elevar su propuesta.
En aquel momento, en la comisión, a la que había asistido Paganini, el canciller había considerado este planteo como «válido y sólido».
Según consignó el portal de Medios Públicos, a la salida de la reunión, en rueda de prensa, el ministro de Relaciones Internacionales declaró: «El eje de la comparecencia estuvo en la preocupación que tenemos todos por violación continua a los derechos humanos en Venezuela, con la situación de detenidos, desaparecidos, torturas y asesinatos”.
El ida y vuelta de Lacalle y Orsi
Lo que está ocurriendo en Venezuela desde el 28 de julio, cuando Maduro se autoproclamó ganador de unos comicios que fueron desacreditados una mayoría de países democráticos —la oposición liderada por María Corina Machado denunció fraude desde un primer momento—, ha sido objeto de debate político en Uruguay, en pleno año electoral.
Los últimos cruces al respecto los protagonizaron Lacalle Pou y el candidato a presidente por el Frente Amplio, Yamandú Orsi.
El frenteamplista ironizó días atrás ante la consulta de los medios acerca de la postura que defenderá Uruguay en la próxima Asamblea General de la ONU, que será de denunciar en los términos que este gobierno utiliza a la hora de referirse al gobierno caribeño: señalándolo como una dictadura que viola derechos humanos.
«Tiembla Maduro…», fue la respuesta de Orsi. «Los que van a decidir sobre Venezuela son unos tigres, ahí hay intereses de los monstruos más monstruos del mundo: Rusia, Turquía, Estados Unidos, Irán. Capaz que escuchan lo que nosotros decimos como país, capaz que se conmueven. Dudo», agregó el presidenciable.
Ante esto, el miércoles pasado Lacalle Pou dijo que en algo de eso estaba «de acuerdo». «Alguien tiembla seguro. Creo que los que tiemblan son los que tienen que tener determinada posición porque les deben muchas cosas», apuntó el mandatario.
