El Gobierno estadounidense consideró este jueves que la negativa del Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela a defender los estándares internacionales y venezolanos de transparencia o a respetar la voluntad del pueblo venezolano expresada en las urnas es una “violación inaceptable” de las leyes del país.
“Los venezolanos votaron, los resultados están claros y su voluntad debe respetarse”, dijo en un comunicado el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
Su declaración, difundida tras haberse cumplido un mes de los comicios del 28 de julio en Venezuela, criticó igualmente el intento del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), “controlado por (el presidente venezolano, Nicolás) Maduro, de silenciar las voces de los votantes ratificando el anuncio infundado del CNE de una victoria de Maduro”.
Miller subrayó que Estados Unidos reitera su llamamiento al respeto de los derechos humanos y las normas democráticas en Venezuela, “la liberación de todos los presos políticos y el fin de los arrestos arbitrarios y otros actos de represión contra miembros de la oposición democrática, los medios de comunicación y la sociedad civil”.
En este mes desde que Maduro se enfrentó a Edmundo González Urrutia, según su nota, el mandatario venezolano y sus representantes han reivindicado “falsamente” su propia victoria y han emprendido una represión a gran escala para mantener el poder.