Padres de familia bloquean la carretera que de Tegucigalpa conduce hacia el departamento de Olancho a la altura del crematorio municipal, exigiendo el derecho que tienen sus hijos para desfilar en la calle principal.
Los padres condenan la determinación de las autoridades de la Secretaría de Educación, de prohibir que desfilen en la carretera y en su lugar, lo hagan al interior de las aldeas aledañas a la carretera.
En el lugar se registra un infierno vial, decenas de conductores de vehículos se encuentran varados en el lugar a la espera de que los manifestantes lleguen a consensos con autoridades policiales y se habilite el paso.