El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, dio por rotas las relaciones con Brasil, y tildó a su homólogo brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, de “arrastrado” y de querer ser el “representante de los yanquis” en América Latina.
Durante una cumbre virtual con jefes de Estado de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), Ortega criticó a Lula por su posición crítica sobre el controvertido resultado de los comicios celebrados el 28 julio, que concedieron el triunfo al presidente Nicolás Maduro con un 51,9 % de los votos frente a los 43,2 % del candidato opositor Edmundo González.
El dirigente sandinista dijo que Lula es uno de los presidentes de América Latina que ha tenido una “reacción brutal” y “cobarde” por no reconocer el triunfo de Maduro, y que forma parte de los “Gobiernos serviles, traidores, arrastrados”.
Es un “gobierno que se ha presentado como muy progresista como muy revolucionario. Ahora que hay que repetir las elecciones (en Venezuela), dicen. Lo dice Brasil, Lula”, reprochó.
Ortega dijo que Lula “de una forma vergonzosa” anda “repitiendo las consignas de los yanquis y de los europeos, y de los Gobiernos arrastrados de América Latina”.