El FC Barcelona sumó su segunda victoria de la temporada 2024-2025 de LaLiga EA Sports tras imponerse este sábado por 2-1 al Athletic Club en su primer partido en el Estadi Lluys Companys, donde dejó una buena imagen ante un rival que sigue negado como visitante ante los blaugranas.
Hansi Flick tuvo un buen debut oficial con el Barça. Tras el revés en el Trofeo Joan Gamper frente al AS Mónaco, en esta ocasión su equipo estuvo a buen nivel y gozó de las mejores ocasiones ante el campeón de la Copa del Rey, que trató de aguantar apoyado en las ganas de Nico Williams, pitado sin demasiada sonoridad por la afición ‘culer’, y en las acciones de Alex Padilla, pero que acabó claudicando por el tercer tanto liguero de un Robert Lewandowski que parece recuperar su mejor nivel goleador.
El 2-1 definitivo no llegó hasta el minuto 75, aunque el equipo local quizá lo mereció antes. Casi siempre, bajo la batuta de Pedri, la novedad en el once respecto a Mestalla, y el trabajo de Raphinha, dio la sensación de controlar el partido, sobre todo en unos segundos 45 minutos donde los de Ernesto Valverde fueron mucho más dominados y les costó mucho más desplegarse hacia el área de Marc-André ter Stegen. Y el partido también comenzó con dominio blaugrana ante un Athletic Club ordenado y que supo sujetar bien a su rival de inicio, además de amenazar todo lo posible con Nico Williams.
Las ocasiones no fueron demasiadas en ninguno de los dos lados y fue el Barça el que golpeó primero con el tanto de la otra ‘perla’ en el terreno de juego, Lamine Yamal. El extremo dibujó su clásica jugada con la zurda al borde del área de Padilla hasta que encontró el espacio para golpear. Íñigo Lekue metió la cabeza y se lo puso ya imposible a su guardameta. Nico Williams estuvo a punto de responder a renglón seguido el tanto de su amigo, pero el 1-0 no varió demasiado el escenario, aunque el conjunto de Flick tuvo más opciones de correr al contragolpe porque el Athletic trató de dar un paso más hacia delante.
Así, Lewandowski avisó con un potente disparo cruzado, pero la madera le negó por primera vez el tanto. Y cuando se llegaba al tramo final, Pau Cubarsí, en un posible exceso de ímpetu, derribó a Alex Berenguer y el VAR avisó a Gil Manzano, que no dudó en decretar el penalti que transformó en el 1-1 Oihan Sancet. LEWANDOWSKI ACIERTA Ni Flick ni Valverde variaron nada durante el paso por los vestuarios. Pero el FC Barcelona salió decidido y dominador, con Pedri asumiendo galones y volcando ahora su juego por la izquierda porque Yamal había perdido algo de ‘punch’.
Lekue sufrió en ese lado y los principales problemas visitantes vinieron por eso lado. Lewandowski se volvió a topar con la madera tras un buen cabezazo que no despertó al Athletic Club, ya con Nico Williams también menos efervescente ante el poderío físico de Jules Koundé. Aún así, casi todo el peligro de los ‘Leones’ llegó cuando el extremo cogió el balón, aunque le faltó encontrar algún compañero, con su hermano Iñaki poco participativo.
El conjunto blaugrana continuó insistiendo para nutrir a su goleador polaco, que se relamía con el gol cuando empaló un centro desde la izquierda, pero que no contó con una gran acción de reflejos y agilidad de Padilla, que evitó el 2-1. Sin embargo, no lo pudo hacer cuando el choque entraba en su tramo final, en otra centro desde la izquierda, este del omnipresente Pedri.
El guardameta metió la mano y el balón le cayó una vez más a Lewandowski, que esta vez no falló para marcar su tercer tanto liguero de la temporada y asegurar la victoria porque al Athletic le faltaron argumentos para el empate y alargó a 24 los años sin ganar a los ‘culers’ como visitante.