Yoshitaka, de 40 años, lleva más de once felizmente casado con Aki, de 65, a pesar de que no se enteró de la diferencia de edad hasta el día antes de su boda.
Yoshitaka sólo tenía 29 años cuando conoció al amor de su vida. Aki manejaba un bar de estilo japonés y, tras entablar conversación, se dieron cuenta de que tenían mucho en común. Ambos habían fracasado en sus matrimonios y estaban criando a sus hijos solos, y después de visitar el bar de Aki varias veces, Yoshitaka le pidió una cita.
El hombre se daba cuenta de que la mujer era un poco mayor que él, pero nunca adivinó su edad y ella tampoco se la reveló, temiendo que eso le asustara. Ella tenía entonces 54 años, pero le dijo a Yoshitaka que tenía 44, y él nunca sospechó nada. Aki siempre estaba alegre y su piel tersa no delataba su edad, así que pudo mantener su secreto durante siete años, hasta el día antes de su boda.
A principios de 2020, justo cuando la pandemia de COVID-19 se preparaba para asolar el mundo, Aki y Yoshitaka decidieron casarse. Consciente de que ella misma podría infectarse y de que Yoshitaka necesitaría saber su edad real para no confundir a los médicos ni a los socorristas, Aki decidió decirle que era 25 años mayor que él. No sabía cómo reaccionaría, pero temía que se pusiera furioso por haberle mentido durante tanto tiempo. No podía estar más equivocada.
«No me importa en absoluto tu edad real, no tiene importancia», le dijo Yoshitaka a su futura esposa. «Lo que importa es por qué no me lo dijiste antes para no tener que preocuparte durante tanto tiempo».
Tras casarse, la pareja japonesa decidió dejar sus trabajos y dedicarse a viajar por Japón, documentando sus aventuras en un canal de YouTube llamado «Una pareja con 25 años de diferencia de edad».
La mujer de 65 años contó a la publicación que parte de la razón por la que mantuvo su edad real en secreto ante Yoshitaka fueron los prejuicios de la sociedad japonesa contra las mujeres mayores que salen con hombres más jóvenes o se casan con ellos.
«Los hombres mayores pueden presumir con orgullo de lo jóvenes y guapas que son sus esposas, pero muchas mujeres que son mayores que sus maridos suelen dudar en revelar sus relaciones a los demás», declaró Aki.