El Juez Castel condenó a 19 años de prisión al exjefe de la Policía Nacional Juan Carlos «El Tigre» Bonilla por un delito relacionado al narcotráfico.
El hondureño durante la lectura de su sentencia, pidió clemencia al Juez Castel, sin embargo, no le concedió la mínima de 10 años que pedía la defensa de «El Tigre» Bonilla.
En la Sala donde se le dictó la sentencia lo acompañaron familaires y algunos de sus hijos, Bonilla tiene 64 años de edad y sufre varias enfermedades, tras su sentencia estaría tras las rejas hasta los 83 años.
Diálogo en la Corte:
Abogado de Tigre: Mi cliente ha admitido que estuvo involucrado en drogas. Pero no este asesinato. Juez Castel: Creo que fue responsable, por preponderancia.
Abogado de Tigre: Aquí, en la sala del tribunal [que de otro modo estaría casi vacía], están presentes la hija del señor Bonilla, su hijo, su hija y una amiga, Marcela Carro. Necesita cirugía de próstata. Una sentencia de 30 años sería una sentencia de muerte. Es un hombre marcado.
Abogado de Bonilla: ¿Quién sabe qué tan seguro estaría en Honduras? Tiene 64 años. Incluso veinte años probablemente serían una sentencia de muerte. Entonces, ¿por qué aceptó la declaración? Pide 10 años. Tigre Bonilla: Esto fue como una muerte anunciada.
Tigre Bonilla: Estaba agradecido de ver a mi familia y amigos aquí. Ten piedad de mi. Cometí un error. Fiscal, todos queremos abrazar a nuestros hijos. Que Dios te dé sabiduría. ¿Cuánto tiempo me queda? Estoy más allí que aquí. Quiero decir, estoy aquí. Gracias
Tigre Bonilla: Tengo una hija de cinco años. Necesito verla. Ten compasión de mí. Las cárceles son terribles en el país. Me baño sólo una vez por semana. AUSA: El jefe de la Policía Nacional de Honduras ayudó a trasladar droga, para Tony Hernández, Los Cachiros, Los Valles.
AUSA: Luego de desempeñar un cargo inferior, MAuricio Hernández Pineda fue condenado por este tribunal a 15 años. Aquí pedimos 30 años. Juez Castel: Bonilla utilizó su cargo para brindar protección armada a los traficantes de cocaína.
Juez Castel: Esto fue mucho más que un error: fue una forma de vida. Tenía un tremendo porte militar, parecía el papel… Hay otros que no volverán a casa con sus familias debido a la adicción. El acusado lo permitió.
Juez: No creo que los traficantes de drogas confíen en usted. Te envié a 228 meses de prisión – 19 años.