Uno de los principales líderes de las protestas estudiantiles que han sumido en el caos a Bangladés ha anunciado una pausa de 48 horas en las manifestaciones, teniendo en cuenta “la situación general”, con decenas de muertos y más de medio millar de detenidos.
Esta decisión llega después de que el Tribunal Supremo respaldase ayer a los estudiantes al anular las cuotas de acceso al empleo público y que los manifestantes denunciaban que como discriminatoria.
No obstante, los estudiantes piden ahora una investigación por las más de cien muertes registradas durante las protestas, en su mayoría estudiantes y civiles, a manos de la Policía.
Sin balance oficial de víctimas
Ni el Gobierno ni la Policía han ofrecido hasta el momento un balance de muertos en los enfrentamientos, aunque un medio de comunicación ha podido confirmar 130 fallecimientos además de más de medio millar de heridos.
Por su parte, el medio local Protom Al sitúa los muertos en 174.
A ello se suman más de 500 arrestados, informó a un medio de comunicación un portavoz de la Policía Metropolitana de Daca, quien agregó que tres de sus agentes han muerto durante las protestas, que comenzaron a principios de julio pero se tornaron violentas el lunes de la semana pasada.
Desde entonces, la tensión ha ido en aumento, lo que ha llevado al Gobierno a suspender los servicios de comunicación móvil y de Internet y a decretar un toque de queda que sigue en vigor.
Los estudiantes exigían la reforma de un sistema de cuotas al acceso al empleo público por entender que les perjudicaba, al reservar el 30 % de los puestos a descendientes de familiares que lucharon en la Guerra de Liberación que llevó a Bangladés a independizarse de Pakistán en 1971.
El Tribunal Supremo ordenó ayer la anulación de este sistema y rebajó esa cuota al 5 %, tras lo que hizo un llamamiento a los estudiantes para que regresen a las clases.