El jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, afirmó este viernes que las negociaciones para un alto el fuego en Gaza y la liberación de los rehenes secuestrados por el grupo palestino Hamás está cerca de concretarse.
«Creo que estamos a unos metros y que avanzamos hacia la línea de meta» para obtener un «acuerdo que produciría un alto el fuego, llevaría a los rehenes a casa y nos pondría en un mejor camino para tratar de construir una paz y una estabilidad duraderas», declaró Blinken en un foro en Colorado (oeste).
La noticia llega un día después de que el propio primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, rechazara la construcción de un hospital de campaña en su país para atender niños palestinos heridos en Gaza, tras nueve meses de guerra.
De acuerdo con el comunicado emitido este jueves por su oficina, Netanyahu «no aprueba la instalación de un hospital para los habitantes de Gaza en territorio israelí», por lo que ese establecimiento «no será instalado».
La construcción del centro de atención sanitaria fue una orden del ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, en el cual se atendería de manera «temporal» a los niños en Gaza cuyas patologías no pueden ser asistidas en el territorio palestino devastado por la guerra.
Según lo indicado por el Ministerio de Defensa, la decisión inicial se tomó “debido a la suspensión de la evacuación de pacientes a través del cruce fronterizo de Rafah” entre Gaza y Egipto. Incluso, Gallant había adelantado a través de un comunicado que el armado de este hospital de campaña fue compartido en una llamada telefónica con su par estadounidense, Lloyd Austin.
El conflicto entre Israel y el grupo palestino Hamás estalló el 7 de octubre, cuando comandos islamistas mataron a 1.195 personas en su mayoría civiles y secuestraron a 251 en el sur de Israel, según el recuento basado en datos oficiales israelíes. El ejército israelí estima que 116 personas permanecen cautivas en Gaza, 42 de las cuales habrían muerto.
Según el Ministerio de Salud del territorio palestino gobernado por Hamás, Israel como respuesta lanzó una ofensiva que ya mató a 38.794 personas en Gaza, también civiles en su mayor parte.