El senador estadounidense Bob Menendez fue declarado culpable el martes de todos los cargos a los que se enfrentaba en su juicio por corrupción, entre ellos aceptar sobornos de oro y dinero en efectivo de tres empresarios de Nueva Jersey y actuar como agente extranjero para el gobierno egipcio.
El veredicto del jurado siguió a un juicio de nueve semanas en el que los fiscales afirmaron que el demócrata abusó del poder de su cargo para proteger a sus aliados de investigaciones criminales y enriquecer a sus socios, incluida su esposa, mediante actos que incluyeron reuniones con funcionarios de los servicios de inteligencia egipcios y la ayuda a ese país para acceder a millones de dólares en ayuda militar estadounidense.
Menéndez, de 70 años, no testificó. Insistió públicamente en que sólo estaba haciendo su trabajo como presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado. Dijo que los lingotes de oro encontrados en su casa de Nueva Jersey por el FBI pertenecían a su esposa, Nadine Menéndez. Ella también fue acusada, pero su juicio se aplazó para que pudiera recuperarse de una operación de cáncer de mama. Se ha declarado inocente.
El veredicto, emitido en un tribunal federal de Manhattan, se produce cuatro meses antes de las elecciones y podría condenar las posibilidades de Menéndez de presentarse a la reelección como candidato independiente.