La imagen ya se ha hecho famosa en los titulares de los diarios y en internet: el expresidente estadounidense Donald Trump, con la oreja sangrando y el puño en alto, rodeado de agentes del Servicio Secreto luego de ser baleado.
Y ahora está en camisetas que se venden por apenas 4 dólares en plataformas por internet de China.
El fin de semana, luego del presunto intento de asesinato contra Trump, minoristas chinos entraron en acción en Taobao y JD.com, las principales plataformas de comercio electrónico del país.
“Devolvamos la Grandeza a Estados Unidos”, dice una de las camisetas, según imágenes que circularon online. “El Tiroteo Solo Me Fortaleció”, dice otra.
Las camisetas usan distintas fotos que captaron el momento, incluso una de las más indelebles, hecha por el fotógrafo de The Associated Press, Evan Vucci.
Si bien gente del todo el mundo podría reconocer el poder de las imágenes, los fabricantes chinos están particularmente bien posicionados para aprovechar una nueva tendencia y comercializarla. China es la fábrica del mundo y su competitiva industria doméstica de comercio electrónico permite a sus empresas explotar todo tipo de tendencias de consumo.
Para el lunes, ya era difícil encontrar algunos de los productos. Una búsqueda por “camisetas de Trump” ya no daba resultados en JD y en Taobao se veían solo otros tipos de camisetas del expresidente estadounidense.
Sin embargo, al ser preguntados, algunos sitios ofrecían otros enlaces para la mercancía, y por un tiempo, si se utilizaba un apodo chino para Trump, se podían conseguir las camisetas.
No queda claro por qué las camisetas pasaron a estar escondidas, pero el internet interno de China, que está aislado del internet global, es regido por un extenso sistema de censura que monitorea también sitios de comercio electrónico. Es posible que el uso de las imágenes haya provocado inquietudes por derechos de autor.
“The Associated Press está orgullosa de la foto de Evan Vucci y reconoce su impacto”, dijo Lauren Easton, la vicepresidenta de AP para comunicaciones corporativas. “Además de ello, nos reservamos el derecho para esta potente imagen”.
Un periodista de un medio de comunicación, pudo adquirir una de las camisetas por 61 yuanes (8 dólares), aunque el enlace original ya no estaba disponible. Un representante de servicio al cliente dijo que violaría regulaciones, sin dar detalles, pero entonces ofreció un enlace para comprar la camiseta.