Una de la imágenes más impactantes del partido fue ver a James Rodríguez llorando desconsoladamente cuando el colegiado César Ramos decretó el final del partido. Eran lágrimas de alegría por alcanzar un sueño que tanto le ha costado conseguir a uno de los jugadores con más talento que ha dado el fútbol colombiano en su historia.
James apenas podía articular palabras cuando era entrevistado a pie de campo a la conclusión del partido. «El árbitro no ha estado bien», alcanzó a decir. «Llevo 13 años aquí queriendo esto. Estoy feliz». Tras decir esto, el jugador se volvió a quebrar y tuvo que parar la entrevista.
Colombia alcanza por tercera vez una final de la copa Argentina. La última la disputó en 2001 y consiguió conquistar el título. Ahora, la selección que dirige Néstor Lorenzo llega pletórica tras sumar 28 partidos consecutivos sin perder, aunque el domingo tendrá que medirse a la campeona del mundo.