La ganadora de esta primera edición ha sido Kenza Layli, una influencer de Marruecos que, según ella, aporta diversidad al panorama de la inteligencia artificial.
Los certámenes de belleza han sobrepasado la barrera de la realidad y se ha coronado a la primera Miss Inteligencia Artificial.
La ganadora ha sido Kenza Layli, una influencer de Marruecos, a la que le gusta el color rojo, el deporte y aportar «diversidad e inclusividad» al panorama de las creaciones de Inteligencia Artificial, según su perfil de Instagram, y recomienda a sus miles de seguidores «invierte en ti mismo a diario».
El concurso se abrió la pasada primavera y en él han participado unos 1.500 programadores de alrededor del mundo, según datos de Fanvue, una plataforma de influencers tanto virtuales como humanos. Después de que el jurado revelase la lista de 10 finalistas en junio, ahora hemos conocido a la belleza ganadora.
Layli ha sido creada por Myriam Bessa, fundadora de la agencia Phoenix AI, quien recibirá un premio en metálico de $5.000, apoyo de la plataforma Fanvue y un publicista para promocionar el perfil de su obra, que acumula unos 200.000 seguidores en Instagram y 75.000 en TikTok. Dos de las finalistas han sido la francesa Lalina Valina y Olivia C de Portugal.
Aunque los influencers virtuales no son nada nuevo, quizá conozcan a la californiana Lil Miquela o la japonesa Imma, estas están hechas por ordenador, de manera obvia, con un equipo de guionistas y directores de arte que diseñan sus escenarios, mensajes y publicaciones en Instagram. Sin embargo, las participantes en este concurso de belleza, tanto sus imágenes, como sus discursos y publicaciones en redes, están íntegramente desarrolladas con programas de inteligencia artificial como Open AI, Midjourney o ChatGPT.