El líder laborista, Keir Starmer, recibió este viernes el encargo del rey Carlos III de formar gobierno como nuevo primer ministro del Reino Unido, tras mantener una audiencia con el soberano en el palacio de Buckingham, residencia oficial de la realeza en Londres.
Starmer se dirigirá ahora en coche hasta la sede del Gobierno en Downing Street, que será a partir de ahora su residencia y despacho oficial, donde dará su primer discurso a la nación como jefe de Gobierno tras lograr una histórica mayoría absoluta en las elecciones generales celebradas este jueves.
El rey Carlos III ha oficializado a Starmer, como nuevo primer ministro de Reino Unido, tras una reunión en el Palacio de Buckingham que ha completado la tradicional coreografía protocolaria tras unas elecciones generales.
En primer lugar, ha desfilado por palacio el primer ministro saliente, Rishi Sunak, que ha asumido en una comparecencia pública la clara derrota electoral de su partido y ha anunciado incluso que presentaría su dimisión como líder ‘tory’.
Después de Sunak, le ha llegado el turno a Starmer, claro vencedor de los comicios del jueves. El Partido Laborista ha obtenido 412 diputados, frente a los 121 logrados por el Partido Conservador, según los resultados oficiales que ya están prácticamente concluidos –a falta del reparto de dos escaños–.
Starmer se instalará ahora en el número 10 de Downing Street, residencia oficial del primer ministro. Entre sus primeras tareas está la configuración de su nuevo gabinete, donde incorporará a parte de los laboristas que obtuvieron un escaños en estas elecciones.
Acompañado de su esposa Victoria, este ex abogado de derechos humanos de 61 años, que ingresó en la política hace solo nueve, fue recibido durante aproximadamente media hora en el Palacio de Buckingham.
Starmer se ha convertido este viernes en el primer político con el título de ‘caballero’ (‘sir’) que asume como primer ministro británico desde el conservador Alec Douglas-Home en 1963.
Otros antiguos jefes del Gobierno recibieron este título o el de lord una vez que dejaron el poder, como ha sido el caso de David Cameron (lord), Tony Blair (sir) o John Major (sir).
A Starmer le fue concedido el título honorífico por la fallecida reina Isabel II en 2014 por sus “servicios al derecho y la justicia penal”, ya que fue fiscal general entre 2008 y 2013.
Entre otras tareas, el líder laborista tuvo una destacada labor como fiscal en casos de juicios a terroristas y bandas del crimen organizado.
El laborismo consiguió una aplastante victoria en los comicios de ayer, al ganar 412 escaños, 211 más que en los de 2019, con lo que puso fin a catorce años de gobiernos conservadores.