El legado de la cantante estadounidense de origen mexicano Jenni Rivera, fallecida en 2012, quedó inmortalizado en las últimas horas con una estrella póstuma que fue aceptada por sus hijos en el emblemático Paseo de la Fama de Hollywood.
«Mi mamá no era mujer que decía ‘sueño con esto’, mi mamá era una mujer de hechos, y decía ‘un día de estos voy a tener una estrella en el Paseo de la Fama’. Me acuerdo del día», dijo emocionada una de sus hijas, Chiquis Rivera, en una gala que honró la memoria de la cantante estadounidense.
Al evento acudieron los cinco hijos de la artista, acompañados por la cantante mexicana y amiga de la familia, Gloria Trevi. Juntos destaparon la estrella número 2 mil 783, que llevará para siempre inscrito en bronce el nombre de Jenni Rivera.
«Cosechando seguirán sus éxitos, como esta estrella, que simboliza su luz en nuestros corazones. Hoy es un día para celebrar la vida de Jenni Rivera», celebró por su parte Trevi.
Centenares de fanáticos de la conocida como ‘La Diva de la Banda’ se agolparon desde primera hora de la mañana a las afueras del edificio Capitol Records de Los Ángeles, lugar donde fue colocada la estrella, para homenajear a la artista con banderas mexicanas y coreando su nombre.
«Adelantada a su época, (Rivera) triunfó en un genero dominado por hombres puso en alto la valentía de las mujeres, se impuso con su legado musical, y su historia personal, y por eso ella es inolvidable e irrepetible», destacó Trevi durante el evento.
Nacida en Long Beach y fallecida tras un accidente aéreo en 2012 en México a los 43 años, Rivera recibió a lo largo de su carrera nueve veces consecutivas el Premio Lo Nuestro, dos Billboard, 22 Billboard de la Música Latina, y cuatro nominaciones a los Latin Grammy.
En 2008, el álbum ‘Jenni’ se convirtió en su primer debut en la cúspide de la Billboard Top Latin Albums.
Su catálogo consta de álbumes multiplatino como ‘Parrandera, rebelde y atrevida’, ‘La gran señora’ y ‘Joyas prestadas’, impulsados por éxitos como ‘Inolvidable’ y ‘Ya lo sé».
En 2013, a un año de su fallecimiento, el museo Grammy le dedicó la primera exhibición de una artista latina en esa institución, y en 2016 la ciudad de Long Beach inauguró el Jenni Rivera Memorial Park.